Sujetos armados que se transportaban en un coche blanco, levantaron al
periodista y lo llevaron a un despoblado. Luego de las amenazas, lo soltaron.
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| EL PERIODISTA Hernán Villarreal Cruz en las oficinas de PRESENCIA |
Bajo la amenaza de “que ya le bajara”
y de que, con una pistola apuntándole la cabeza, “no te matamos por lo que
representas”, un grupo de al menos tres sujetos armados que viajaban en un
automóvil tipo Chevy Chevrolet, color blanco, sin placas, levantaron la noche
de ayer al reportero de PRESENCIA, Hernán Villarreal Cruz, y luego de unos
cuarenta minutos lo dejaron libre para darse a la fuga, cuando ya un operativo
de la policía estatal se había puesto en marcha en búsqueda del periodista.
Eran las 21:50 horas de ayer sábado,
cuando el reportero de esta casa editorial, en su día de descanso, se
encontraban en un establecimiento dedicado a la renta de películas, ubicado
sobre la avenida 20 de Noviembre en el lugar conocido como El Camichín, cuando
de pronto sujetos a bordo de un automóvil color blanco sin placas de
circulación, tipo Chevy llegaron hasta el lugar para “levantarlo”.
Villareal Cruz, se encontraba en
compañía de su novia, de quien se omite su nombre por razones de seguridad. De
acuerdo a la información proporcionada por el reportero, se encontraba adentro
del establecimiento, cuando de pronto se le acercó un adolescente de entre 13 y
14 años de edad, quien le dijo, “Hernán te habla Armando”.
El reportero-editor al atender el llamado,
salió del establecimiento para cerciorarse si afectivamente su compañero,
Armando Serrano Domínguez, tambvién reportero de PRESENCIA estaba afuera,
dejando a su novia en el interior checando algunos títulos.
Cuando salió un sujeto desconocido le
cubrió la cabeza con una especie de bolsa y a la fuerza lo subieron al
vehículo, llevándoselo con rumbo desconocido, Villareal Cruz, indicó que solo
escuchaba voces, que le decían “Hijo de tu puta madre, ya bájale, no te matamos
por lo que representas, si te matamos se nos vienen encima, pero ya nos tienes
hasta la puta madre”.
Al mismo tiempo del levantón, su
compañero Armando Serrano recibió un mensaje por whappsat, del número de
celular de Hernán, el cual decía “Ey sabes, me levantó el grupo contrario,
apenas y dicen ke me calme, pero no se de ke”, segundos después llegó
otro que decía “Estoy acá por la cabeza Olmeca”.
Sin embargo, una testigo que vio
justo el momento del levantón avisó a las oficinas de Diario Presencia, vía
telefónica, la cual dijo, “sí, ¿Las oficinas de Diario Presencia?, lo que pasa
es que acabo de ver que levantaron a un muchacho, creo que trabaja ahí en
Presencia, es una chaparrito, lo golpearon y lo subieron a un carro blanco sin
placas, tipo Chevy, les aviso porque no vaya a ser que le hagan algo”, refirió.
Después de esta alerta, personal de
esta casa editorial, dio parte a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado,
quienes se movilizaron en la búsqueda del vehículo sospechoso.
Sin embargo alrededor de las 22:20,
el reportero Hernán, realizó una llamada al director del diario, Roberto
Morales Ayala, donde le informaba que necesitaba ayuda, que lo habían dejado
tirado en el libramiento de la colonia Anáhuac, en contra esquina con la
calle Joaquín Amaro.
De inmediato sus compañeros y un
grupo de seguridad se trasladaron al lugar, y ahí fue encontrado, evidentemente
desesperado y lleno de lodo, de las rodillas hacia abajo. Del vehículo lo
bajaron a empellones, injurias y amenazas.
Hernán Villarreal indicó que sintió cómo
que lo llevaron a una loma, cerca del lugar donde lo dejaron abandonado, y ahí
lo bajaron, le pegaron unos golpes en las costillas y le sacaron el aire, y le
siguieron amenazando de que si no le bajaba le harían daño.
Después de que fue encontrado, fue
llevado a las oficinas de esta casa editorial, donde elementos de la SSP,
resguardaron la zona y aseguraron el lugar, además de que reforzaron la
seguridad, pues desde los pasados comicios electorales, fue asignada
vigilancia, por amenazas de atentados contra de las instalaciones de PRESENCIA.
Hoy por la mañana, a primera hora,
será formulada la denuncia penal ante la agencia del Ministerio Público del
fuero común para que el caso sea turnado a la Fiscalía Especializada para La
Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión, a la cual
pertenece a la Procuraduría General de la Republica (PGR).
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