MÚSICOS APOYAN LA LUCHA AMBIENTAL CONTRA EL COQUE EN EL SUR DE VERACRUZ

Festival por la vida: ¡No a la planta de coque en Jáltipan!
Soneros, jaraneros y músicos populares apoyan la resistencia en el sur de Veracruz

Músicos y trabajadores de la cultura de Jáltipan convocan, este 18 de agosto a las 8 de la noche, en el parque central de su ciudad, al Festival por la vida ¡No a la planta de coque en Jáltipan! Con esta actividad, los músicos y artistas muestran su adhesión a la defensa de la vida y la salud de sus comunidades, así como a la defensa del medio ambiente en el sur de Veracruz, gravemente agredido por muchos proyectos extractivos e industriales.

Participarán en este festival Los Cojolites, quienes han mantenido en esa ciudad una tradición de festivales, talleres y seminarios sobre el Son Jarocho y la cultura de la región, así como el Centro de Documentación del Son Jarocho, que alberga y organiza este tipo de actividades artísticas y culturales.

En el programa del festival del 18 de agosto están incluidos también Los Chogotzin, Flor de Uvero, Pata e Vaca, Jaraneros de Boquiapan, Nicomedes Pacheco y su grupo, Enrique Ocaña y Oscar Bronx (de Las Estrellas de Niche).

De los Jaraneros de Boquiapan, ha escrito Ricardo Perry: “En la comunidad de Boquiapan existe una familia que ha mantenido la tradición del son jarocho en su comunidad. Los Silvestre, como se apellidan, son comandados por Don Apolonio, un viejo campesino y pescador, y está integrado su grupo por uno de sus hijos, por su mujer y sus hijas que bailan y por sus hermanos. Ellos tocan un son jarocho campirano y organizan desde hace 4 años un evento en diciembre en su comunidad donde reúnen a los músicos y fandangueros de nuestro pueblo.”

Acerca de Nicomedes Pacheco y los Jaraneros de San Lorenzo, el director artístico de los Cojolite compartió: “Don Nico, como lo conocemos, es el jefe de una familia de músicos radicados en la comunidad de San Lorenzo, muy cerquita de la cabecera municipal. Tiene Don Nicomedes la virtud de ser un jaranero que le dio continuidad al son jarocho en momentos en que nuestra música vivió momentos no buenos en el pueblo, pues casi eran ellos solos los que mantuvieron nuestra tradición por muchos años, enseñando a sus hijos y ahora a sus nietos a ejecutar la música y conformando una agrupación que se distingue por su forma de tocar muy peculiar. Don Nico es laudero, constructor de sus propios instrumentos.”

En Jáltipan la población ha vivido y padecido el esplendor y la miseria de una planta extractora de azufre, cuyos residuos peligrosos mal remediados llegaron a incendiarse espontáneamente por el calor en años pasados. Luego se han movilizado e impedido la instalación de una planta incineradora de desechos tóxicos que poderosos industriales pretendían instalar en lo que llamaban “un pueblo fantasma” ya previamente contaminado por la Azufrera.

Ahora la sociedad de esa región se moviliza en resistencia contra la instalación de una planta de coque, que vendría a profundizar la crisis ocasionada por la contaminación de la azufrera, por la falta de agua potable en calidad y cantidad suficiente y por la agresión al medio ambiente que padece todo el estado veracruzano debido a la salvaje explotación de sus recursos como el petróleo y otros minerales y el agua.

  

INFORMACIÓN: ZAPATEANDO WORDPRESS