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Los Políticos
Por
Salvador Muñoz
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(El
pasado 31 de marzo, el director de Administración y Finanzas de la SIOP, Franz
Retolaza García, se separó de la dependencia.
El asunto no tendría relevancia de no ser por los motivos que
lejos están de ser “personales”.
La acusación que pesa sobre el funcionario de Tomás Ruiz
González es cosa seria: Acoso a menores.
Si bien, las primeras noticias difundidas hablaban de “abuso”,
afortunadamente los hechos no llegaron a esos extremos que lastiman a una
sociedad, ya vapuleada por los últimos acontecimientos en torno a nuestra
juventud y ahora, desgraciadamente, en nuestra niñez.
Como sea, es ofensivo. Más cuando está el caso de los Porkys,
donde los presuntos responsables son unos jóvenes pudientes; o el caso de la
joven golpeada por un acosador callejero, que actualmente vaga como si nada; o
el caso de la joven que es violada y graban el hecho como si fuera una
travesura. Hoy, el asunto es más tortuoso cuando es un funcionario al que
involucran en el caso de Acoso a Menores.
Veracruz vive una situación complicada en el ánimo social. A
veces el aplicar las Leyes no basta. Más cuando hoy en la entidad, se tiene más
sed de justicia que de leyes.)
I
Le pregunto si el Fiusha será el distintivo en su campaña, pues
el domingo inició con una blusa de ese color y en la reunión que sostuvimos
este lunes, igual. Me responde que sí, aunque arroja una cápsula cultural: el
fiusha sale del azul intenso y el rojo brillante, aunque precisa, “es un rojo
PT; el del PRI es rojo Fidel”. Es la candidata del Partido del Trabajo, Alba
Leonila Méndez Herrera, quien habla de cómo pasa de la religión a la política,
de esa rara anécdota que la llevó a ser “detenida” en un operativo policiaco,
del porqué le desagrada Miguel Ángel Yunes Linares, y de su deseo de ser la
segunda mujer que gana a nivel estatal, una elección aquí en Veracruz.
II
Alba Leonila fue coordinadora de Pastoral Social en Atzalan,
donde motivaba la participación de ciudadanos y el altruismo. Por supuesto, los
partidos se acercaban a la Iglesia y ellos escuchaban sus propuestas y el que
más los convenció, fue el PAN. Allá por el 98, la proponen como suplente de
Sindicatura. Quien compite por la alcaldía pierde y rechaza ser regidor y
entonces la impulsan a ella, quien a su vez, igual, no acepta el cargo. Quitada
de la pena, a los pocos días se dirigió a dar plática a la Iglesia, pero el
sacerdote ya no la dejó entrar. La razón: Quien predicaba el involucramiento de
la sociedad para participar en su desarrollo, no se quería involucrar, por lo
que su testimonio en la Iglesia no sería congruente… tuvo que aceptar ser
regidora.
III
¿Pero cómo de regidora pasa a ser Diputada federal “pluri”
siendo una total desconocida incluso en el mismo PAN? A la hora de seleccionar
a cuatro candidatos, en las propuestas iban puros varones, por lo que el Comité
Ejecutivo Nacional del PAN pidió que se incluyera a dos mujeres. Con la
intención de que en la elección perdieran, los dirigentes locales propusieron a
dos, entre ellas, a la regidora, quien aceptó el reto.
Momentos antes de presentar su discurso para la selección, su
esposo José Trinidad Téllez González, le pide a Alba Leonila que camine de la
entrada al templete y se regrese y le dejará de pedir que desista, no estaba
convencido pues todo estaba elaborado para hacer perder a las mujeres. Ella
camina y regresa por el pasillo y entonces su esposo le pregunta: “¿Cuántos te
saludaron?”, sólo Yola Olivares, fue la respuesta. Y entonces entendió Alba
Leonila que no tenía apoyo más que de 30 personas que de Atzalan llegaron con
ella. Y aunque pidió el apoyo de grupos, éstos se lo negaron.
Cuando pasó, su discurso fue tan emotivo, tan sincero, que
sacudió a los panistas ¡y votaron por ella dejando fuera a Abel Cuevas Melo!
IV
El sacerdote de su parroquia, cuando supo que era Diputada
federal, le “fió” su Volkswagen blanco y así fue que llegó Alba Leonila a San
Lázaro el primer día, donde no la dejaban entrar. No. No llegó en vochito para
salir en Suburban… en el tiempo que fue legisladora, pudo por fin comprarse su
casa y le alcanzó para un Ford Ka. Aunque realmente su mayor adquisición fue
haber hecho amistad con Felipe Calderón Hinojosa, a quien compartió un sueño
que tenía como diputada: hacer una clínica rural en Atzalan. Sí, efectivamente,
como diputada no lo logró, pero a Calderón no se le olvidó y él siendo
presidente, hizo posible el Hospital que hoy atiende a 18 municipios de la
zona.
V
Siendo alcaldesa, empezó a recibir llamadas de extorsión por un
grupo delincuencial. Era el año 2005. Se hizo la valiente porque uno de sus
propósitos era combatir al crimen, más en una zona que desde pequeña,
recordaba, se vivía con violencia.
Pidió la ayuda del presidente Vicente Fox y éste la canalizó con
Santiago Creel. Ella propuso un operativo y tras su insistencia, aceptó el
Gobierno federal, y se hizo sin que el Estatal lo supiera.
Se presentó al “Toddys”, el jefe de esa banda, quien estaba muy
interesado en conocerla porque su suegra, quien vivía en Zapotitlán, tenía dos
imágenes en la casa: una, de la Virgen Morena; y otra, de la panista. Pero no
sólo eso, su “segundo frente” igual tenía un poster en casa de Alba Leonila.
La historia amerita más líneas pero baste decir que cuando la
Policía Federal entró en acción, en la confusión, es “detenida” Alba Leonila. Y
si eso fuera poco, cuando se aclara desde el Altiplano su situación, el
Ministerio Público tardó más de 12 horas para que la alcaldesa pudiera
denunciar los hechos.
VI
Traidor. Así llama una y otra vez a Miguel Ángel Yunes Linares.
Lo ve como una persona sin sentimientos, que busca el poder por el poder.
¿Traidor? Sí, dice que traicionó a Felipe Calderón, Rafael Moreno Valle, a
Josefina Vázquez Mota, y a ella. Por ahí cita la “desaparición” de varios
millones de pesos en la anterior campaña donde insinuó el choleño que ella los
tenía. A esa calumnia, se le suma los ataques internos que tuvo como candidata
a diputada tanto por Yunes Linares como por otros panistas. Por eso, cuando se
entera que va de nuevo Miguel Ángel como candidato, le dice a la cúpula panista
que no participará para apoyarlo. Por eso, cuando el PT, a nivel nacional, ia
invita a participar, acepta con la convicción de que a diferencia de otros
candidatos, sabe lo que es tener el estómago vacío, lo que es desmayarse al
sufrir asma y no tener medicamentos, lo que es ponerse unos zapatos hasta los
cinco años, y sobre todo, porque sabe que las mujeres en Veracruz, hacen
historia y ya una mujer lo demostró al ganar contra todos los pronósticos y
contra Miguel Ángel Yunes Linares: Josefina Vázquez Mota.
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