Foto: Cuartoscuro
|
Andares Políticos
Benjamín Torres
Uballe
@BTU15
Indignante,
por decir lo menos, resulta una vez más el cinismo del priista Javier Duarte de
Ochoa, gobernador de Veracruz, para referirse a la desaparición de cinco
jóvenes en el municipio de Tierra Blanca: “… en el estado de Veracruz.
Tenemos un caso en Tierra Blanca, y lamentablemente en temas de seguridad
pueden hacerse 99 cosas bien, pero con que una salga mal ese es el tema, como
es el caso que hoy nos obliga a estar atentos y pendientes”. Caray, eso es
pura mala suerte.
En
el “levantón” de los jóvenes participaron policías estatales, de los cuales han
sido detenidos siete elementos y, según el fiscal Luis Ángel Bravo Contreras,
la mitad de ellos no había pasado los exámenes de control y confianza.
¿Entonces por qué seguían atracando?, perdón, ¿por qué seguían trabajando?
¿Quién y por qué lo permitió? De este tamaño es la anarquía y desgobierno que
ha caracterizado a la actual administración de la entidad jarocha.
Como siempre sucede
en estos casos, han sido las familias de los “desaparecidos” quienes presionaron
a las autoridades para que lleven a cabo las investigaciones; a ello –y para
acentuar la mala suerte- ha colaborado la amplia difusión del vergonzoso hecho
en las redes sociales. Insisto, esto no es sino mala fortuna para el ya de por
sí desprestigiado Duarte de Ochoa.
Y digan si el
infortunio no se ha ensañado con el gobernador jarocho. Aún conmovidos hasta el
llanto por el lamento del 99 por ciento, este miércoles llegó otra noticia
incómoda: el asesinato en Coatzacoalcos del empresario Gertrudis Guízar
Valladares, hermano del diputado federal por el Partido Encuentro Social,
Gonzalo Guízar Valladares. Pero la teoría puede modificarse, faltaba más,
podría quedar así: “… en temas de seguridad pueden hacerse 98 cosas bien, pero
con dos que salgan mal…” y seguir hasta el infinito.
La amnesia parece
también estar haciendo estragos en Javier Duarte, pues asegura que los índices
delincuenciales van a la baja en Veracruz. Sin embargo, pretende pasar por alto
que durante su gestión han sido asesinados, agredidos y desaparecidos el mayor
número de comunicadores en el país. A ello, solo sugirió a los periodistas que
se portaran bien.
Veracruz, según la
asociación Alto al Secuestro, que dirige Isabel Miranda de Wallace, ocupó el
pasado diciembre el cuarto lugar en secuestros (16) a nivel nacional, sólo por
detrás del Estado de México, Tamaulipas y el Distrito Federal. En tanto que en
el periodo comprendido del 1 de diciembre de 2012 al 31 de diciembre del 2015,
se ubicó en el sexto sitio con 504 plagios denunciados. Como puede observarse,
la inseguridad es un tema ardiente que le quema las manos al mandatario
estatal, a pesar de su infundado optimismo.
Pero, ¿cuál es la
consecuencia del cuestionado y polémico desempeño del gobernador priista, por
ahora enfrascado –además de sus demagógicos intentos de justificación- en una
abierta confrontación con sus enemigos los Yunes del PAN y del PRI? Nada menos
que la pérdida de la gubernatura.
Sí, el Partido
Revolucionario Institucional definitivamente estaría en riesgo de perder las
próximas elecciones para gobernador a causa del mal trabajo realizado por
Duarte de Ochoa, y en Insurgentes lo saben: fuentes consultadas por este
columnista y que pidieron el anonimato consideran poco probable conservar el
poder a causa del desaseo con el cual ha operado el gobernador. Máxime que
tendrían que enfrentar una alianza cuyo propósito fundamental es echar al
tricolor del gobierno estatal.
Son muchos los
enemigos políticos que tenazmente se ha buscado Javier Duarte y seguramente
buscarán cobrar la factura correspondiente en cuanto les sea posible. Esto se
suma a que en cuanto concluya su periodo de “gracia”, los reflectores estarán
sobre él, especialmente si el PAN llega a ganar las elecciones. La pregunta es
si luego del “Moreirazo”, el PRI estaría dispuesto a proteger y solapar a don
Javier, cuando ya muchas voces exigen que se investigue a otro de sus
“protegidos”, Fidel Herrera Beltrán, de triste paso por el gobierno de Veracruz
y quien hoy disfruta del manto de la impunidad a costa de los impuestos de los
contribuyentes en el Consulado de México en Barcelona. Quedar en orfandad
política vendría a confirmar la mala suerte de Duarte.
@BTU15
Sobre Benjamín Torres
Uballe
Escritor
y poeta. Ama la música, el futbol, el vino tinto, la charla, a sus amigos. Pero
sobre todo a su hija... ¡ah!, también a su invencible y bella mujer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario