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Fuera de Foco |
¿No se cansarán de sí mismos
quienes integran este gobierno? ¿Soportarán verse al espejo y ver lo putrefacto
de sus almas? ¿Podrán dormir noche a noche después de llevar a cuestas, tantos
muertos, tantos secuestros, tanto dolor de quienes buscan desesperadamente a
sus familiares desaparecidos? ¿No se les caerá la cara de vergüenza al ver las
caras de sus hijos? ¿No les provocará horror en el tipo de seres humanos que
los convertirán, pues los hijos son el reflejo de los padres? Dicta el conocido
refrán popular: “El que a hierro mata, a hierro muere”. La justicia
llega aunque ellos piensen que lo podrido de sus almas esté blindado con
los billetes manchados de sangre. Que el hurto y enriquecimiento ilícito los va
a proteger del castigo en el pase de factura de la vida. Todo llega a su justa
medida y serán pisoteados de parte de quienes menos piensan y les duelen más
–si es que quieren a alguien-.
Un nuevo
hallazgo de cuerpos putrefactos en un basurero ubicado a un costado de la
carretera estatal La Tinaja-Antorcha en el municipio de Emiliano Zapata. Cerca
de “El Lencero”. Lo curioso de espeluznante hallazgo, es que está muy, pero muy
cerca de la Academia Estatal de Policía, donde Arturo Bermúdez Zurita despacha
y hasta mantiene un zoológico clandestino, repletos con animales exóticos sin permiso
de laProcuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa);
un verdadero feudo diseñado para un sujeto que se siente Arturo Durazo Moreno
alías “El Negro Durazo”.
La organización civil Causa Común
sostiene en uno de sus reportes que 15 entidades de la República Mexicana han
reprobado su certificación de desarrollo policial y de confianza en la
población. Las entidades con mayor número de policías no aprobados y que siguen
activos son: Veracruz con un 34 por ciento, Michoacán con un 28 por
ciento, Sinaloa con el 27 por ciento, Baja California Sur con el 26 por ciento
y Nayarit con el 21 por ciento. Por ello aseguran que no les debe de
extrañar lo que pasó con los jóvenes secuestrados por los policías de Arturo
Bermúdez Zurita hace unos días en el municipio de Tierra Blanca.
En el caso de los cuerpos
encontrados en el basurero por El Lencero no era precisamente una fosa. Se supo
que los cuerpos –muchos en huesos y roídos por los zopilotes- algunos de ellos
tenían mucho tiempo de haber sido tirados en el lugar, es decir, era un
tiradero de cadáveres a cielo abierto. También se supo que otros cuerpos son
recientes. Mi pregunta: ¿Cómo es posible que tan cercano a la Academia de
Policía estos no hayan detectado las osamentas? No jueguen con nuestra
inteligencia, porque ya han llegado a nuestro límite.
Otro aspecto que indigna
enormemente, es que el Fiscal General del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras
solo se dedica a tapar la putrefacción del gobierno estatal. Una razón por la
que se comporta omiso, es porque él está incluido dentro del paquete de
corruptos, siempre ha sido parte de la cloaca en donde están cómodos quienes se
sienten poderosos.
Pero que me dice amable lector de
la “nueva” –ni tanto- en la Corrupción Estatal de Derechos Inhumanos –perdón,
Comisión Estatal de Derechos Humanos-, Namiko Matzumoto Benítez. ¿Se ha
pronunciado con relación a los cinco jóvenes levantados por los policías?
¿Se ha acercado a la familia? No. Calladita se ve menos cachetona, además,
todos sabemos la forma como se gestionó ante los ojos del gobernador. Tenía
carrera y había demostrado su ineptitud en su paso como secretaria
técnica de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas
(CEAPP). Su presea, el reconocimiento gubernamental por sus buenos servicios,
fue el nombramiento en dicho elefante blanco.
Mientras tanto, en el estado de
Veracruz no hay rincón que no esté siendo azotado y literalmente azorado por
parte de la delincuencia. Javier Duarte de Ochoa, mal gobernante de
Veracruz, se atreve a declarar en la Reunión de Seguridad Sur-Sureste en la
ciudad de Oaxaca que en el estado ha bajado “significativamente” a un 35 por
ciento el secuestro y la extorsión el 21 por ciento. Cuando no existe
municipio o localidad de la entidad que sea considerado como foco rojo. Existen
reportes de personas que están siendo “levantadas” -muchas de las ocasiones,
por parte de los mismos elementos de la Secretaría de Seguridad Pública- y
extorsionadas en la entidad. Muchas familias en la propia capital del estado,
han tenido que abandonar sus viviendas al temer por sus vidas, por no
encontrar elementos de protección. Grupos delincuenciales se han asentado en
sus colonias y fraccionamientos, van casa por casa a exigirles cuota de
protección. Esto señor gobernador, ya es el colmo. ¿A dónde quiere llegar?
Pese a las evidente situación que
vive la entidad veracruzana, se atreve a decir que el caso de los jóvenes de
Tierra Blanca, es “una” de las cosas malas que han sucedido en el estado, de
las 99 cosas “buenas” que trascienden en su administración. En verdad
son declaraciones tienden a la indignación generalizada. Declarar una sandez
así, cuando el estado ha sido saqueado por más de 100 mil millones de pesos;
cuando todos los sectores han sido absolutamente paralizados a causa de
que los recursos destinados y/o etiquetados para ellos, simplemente el
gobernante actual los esfumó y los destinó para algunas de las cuentas
abultadas en Las Islas Caimán o cualquiera de los 73 paraísos fiscales en el
mundo; cuando maestros, estudiantes, periodistas y jubilados del Instituto de
Pensiones del Estado (IPE) han sido golpeados salvajemente, unos por exigir
lo que por derecho les corresponde y otros, por dar cobertura a tales bajezas.
Cuando hay 16 periodistas asesinados y cuatro desaparecidos.
¿Hasta cuándo señores dejarán de
provocar tanta inmundicia en el estado? ¡Hasta cuándo! Al parecer al gobierno
de Javier Duarte de Ochoa no les ocupa ni les preocupa estar en todos los
noticieros tanto nacionales como internacionales. En este momento, el noticiero
CNN México, en todas sus emisiones informativas, están haciendo reportajes
completos con respecto al tema de los cinco jóvenes levantados por los
policías estatales. Mientras tanto el fiscal General de Veracruz, alzando la
alfombra para ocultar todo el cochinero de la Secretaría de Seguridad Pública.
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