* Afirman que serán afectados 12 mil locales comerciales y más de 60 mil puestos de trabajo; adelantan que lucharán con todo para evitar el paso del sistema por la zona comercial
María Juárez Flores, presidenta de la Organización de Comerciantes Establecidos de La Merced, A. C aseguró que serán más de 60 mil los comerciantes afectados.
México, D. F., a 23 de junio de 2011
Por la falta de información oficial de lo que consideran es una “imposición improvisada”, la Organización de Comerciantes Establecidos de La Merced, A. C., manifestó su rechazo a la construcción del Metrobús Línea 4 en la referida zona comercial, la cual afectaría a un número aproximado de 12 mil comercios establecidos y más de 60 mil empleos directos.
El cierre de la calle Juan Cuamatzin para uso exclusivo del Metrobús no sólo afectará a quienes tienen sus establecimientos en mencionada arteria, sino que a decir de su presidenta María Juárez Flores, afectará a toda la zona porque es una de las cuatro vías que atraviesan La Merced.
Cuamatzin será suprimida como zona para carga y descarga de los comercios en las calles y avenidas aledañas como Fray Servando Teresa de Mier y Anillo Circunvalación, lo cual también impedirá abastecer sus negocios, además de que perderán clientela que no podrá acercarse a realizar maniobras de carga.
Por este motivo, los comerciantes están dispuestos a impedir el paso del Metrobús en la zona, con el fin de mantener sus fuentes de ingresos, por lo que anunciaron la realización de movilizaciones y acciones de resistencia civil pacífica, pero sobre todo, por ser gente de trabajo, ingresarán amparos y toda clase de recursos jurídicos, así como una amplia campaña de información a la sociedad civil.
El proyecto Metrobús, destacó Annia Sandoval, no es una necesidad para ésta zona. La Merced tiene diversas modalidades de transporte, desde las diferentes rutas de los llamados microbuses, pasando por el Metro con tres líneas que se entrelazan en la zona y la RTP.
Además, en voz de su presidenta dijeron que la obra es tan improvisada que “ni siquiera tienen un estudio del subsuelo. En la zona tenemos edificios que se están hundiendo y con el paso del Metrobús corren el peligro de derrumbarse”.
Los comerciantes se quejan de que la desinformación propiciada por el Gobierno del Distrito Federal no sólo les genera indefensión por la carencia de argumentos jurídicos para presentarse ante las autoridades con una defensa acertada, sino que también produce intranquilidad por los constantes “borregazos” que les dan a conocer a cada momento.
También destacaron la falta de atención de los funcionarios, quienes les prometen reuniones de trabajo para dar a conocer avances en el proyecto, las cuales cancelan el día previo o a pocas horas de realizarse.
María Juárez, el asesor Alfonso Arana y Annia Salazar, quien leyó el comunicado dado a conocer, aseguraron que durante las reuniones con las autoridades, los funcionarios les aseguraron que ya todos los comerciantes —incluidos ellos— ya estaban completamente de acuerdo con la construcción de la Línea 4, sin embargo, “en su propia cara se los negamos porque ni nosotros ni otros vecinos de la zona queremos el Metrobús por ahí”.
Agregaron que “a las 60 mil personas entre propietarios y trabajadores que seremos afectados habrá que sumar los miles de empleos indirectos que se afectarán, como son los de los carretilleros y otros oficios que se ven favorecidos por éste muy particular polo comercial, de una tradición de siglos y destacada incidencia en la economía de nuestra ciudad y el país”.
Durante la lectura del comunicado Annia Sandoval destacó que “quizá nosotros conocemos poco de transporte, pero sabemos que si las autoridades del Gobierno del Distrito Federal quisieran un transporte más efectivo para ésta zona, el primer paso que deberían dar es el de la regularización del transporte; el segundo es el de la organización y el tercero el del control, pero sin corrupción. Es decir, dejando de lado las entradas subterráneas de dinero para un buen funcionamiento de los servicios”.
Sin embargo, los Comerciantes Establecidos de La Merced destacaron que “si existe un caos en esta ciudad, éste es propiciado por las propias autoridades” porque si vivimos en una anarquía, ésta es apadrinada por los propios funcionarios gubernamentales que mediante el llamado “entre”, permiten que quien tenga el dinero suficiente, se coloque donde quiera, afectando a quienes somos establecidos, pagamos impuestos a la ciudad y al país, además de cumplir con otros ordenamientos legales.
Y hoy con la bandera de la anarquía como punta de lanza, “pretenden acabar con el patrimonio y el trabajo de muchos años y querrán echarnos a la calle, porque el trazo de su Metrobús acabará con la afluencia de clientes a nuestros comercios”, finalizaron.
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