Jair García - viernes, junio 17, 2011
Debido a que en los últimos cuatro años la violencia contra las mujeres se ha duplicado y ha tomado características brutales que en 15 años han costado la vida de mil 456 mujeres, el gobernador Javier Duarte de Ochoa envió una iniciativa para tipificar el feminicidio y sobre todo para sancionar severamente este delito, con una sanción de 40 a 70 años de prisión.
Por ello, propone reformas al Código Penal y al Código de Procedimientos Penales para establecer un marco jurídico que prevenga, atienda, sancione y erradique la violencia de género contra las mujeres y garantice los derechos de las víctimas y su acceso a la justicia.
De igual modo, esta iniciativa plantea que se generen condiciones que eliminen la discriminación hacia las mujeres, y que se haga efectiva la práctica de la igualdad de género y, en general, fortalecer el régimen jurídico de defensa y garantía de los derechos de las mujeres.
Con la reforma propuesta por el Ejecutivo, cometerá feminicidio quien por razones de género prive de la vida a una mujer, lo cual se enmarcará cuando exista o haya existido entre el activo y la víctima una relación de parentesco por consaguinidad o afinidad, de matrimonio, concubinato, noviazgo, cualquier otra relación de hecho o amistad.
También cuando exista una relación laboral, escolar, o cualquier otra que implique confianza, subordinación o superioridad.
Igualmente cuando la víctima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo, o que a la agraviada se le hayan infligido lesiones infamantes, degradantes o mutilaciones previamente a la privación de la vida, o se realicen marcas infamantes o degradantes sobre el cadáver.
El feminicidio también estará encuadrado cuando existan antecedentes de amenazas, acoso o lesiones por parte del ofensor; cuando el cuerpo de la víctima sea expuesto o arrojado en cualquier lugar público o que la víctima haya sido incomunicada.
De acuerdo con las estadísticas, bajo las que se respalda esta iniciativa, se indica que en el año 2007 se presentaron 44 casos de homicidio contra mujeres, que encuadrarían como feminicidio, y para el año 2009 alcanzó la cifra de 101, con una tendencia de crecimiento desde entonces.
El gobernador Javier Duarte de Ochoa planteó dentro de la exposición de motivos que una de las características de los asesinatos de mujeres es la brutalidad con la que se les priva la vida, pues para victimarlas se usan medios primitivos como el ahorcamiento, estrangulamiento, sofocación, ahogamiento e inmersión, además que la proporción en que son envenenadas, quemadas o hay de por medio objetos cortantes es tres veces mayor que en los casos de hombres.
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