Norma Trujillo Báez - lunes, junio 13, 2011
Vivimos en un país de precariedad institucional en el que de un muro demográfico hemos pasado a una tragedia demográfica, los programas sociales del gobierno federal no funcionan en el combate a la pobreza y en la medida que se incrementa ésta en los 32 estados del país más niños salen a trabajar para sobrevivir, consideró el director del Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social AC (Ceidas), Mario Luis Fuentes.
El profesor del posgrado de Desarrollo Social del Programa Único de Especializaciones de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de México (UNAM), durante su participación: ¿Por qué la lucha conjunta contra la pobreza favorece la erradicación del trabajo infantil?, organizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), dijo que es necesario articular los programas porque hoy están desarticulados y generan desigualdad y discriminación.
Si por pobreza entendemos las acciones contenidas en términos de satisfacer ciertas carencias sociales, salud, educación, vivienda, seguridad social, aún en esa posición limitada, pero oficial, tenemos graves deficiencias y la capacidad de esa lucha en conjunto, señaló el investigador.
Al referirse al estudio realizado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) sobre los Programas sociales 2008, destacó que seis de cada 10 programas sociales tienen problemas de definición clara de objetivos, que siete de cada 10 tienen graves problemas de definir el impacto de sus acciones, que hay un problema de descoordinación, de falta de integración entre los programas federales de combate a la pobreza y los programas de los estados y municipios.
Y agregó que el programa de Oportunidades que sin duda logra mayor asistencia escolar, sobre todo de niñas, mayor permanencia escolar y mayor asistencia a salud, “pero estos indicadores son años escolares, claro es un programa que aborda los aspectos de salud y educación, pero Oportunidades no es el programa que va a romper el ciclo de la pobreza”.
En ese sentido, la lucha conjunta es probablemente uno de los problemas centrales de un enorme desbordamiento institucional, no existen estructuras para articular esfuerzo conjunto, incluso en las dimensiones de la pobreza multidimencional.
Por ello dijo que detrás del trabajo infantil “no sólo está una ineficaz, no coordinada, no eficiente política en contra de la pobreza, no sólo está que tenemos sobrepuestos una serie de programas, unos sobre otros, está que no existe propiamente una política social”.
“Estamos en un proceso que genera desigualdad creciente a través de un proceso de una ruptura de los temas del mercado de trabajo, un mercado precario, que explota, bajos salarios, que invisibiliza la explotación, obviamente el trabajo, grandes problemas, por eso el circulo vicioso se enfrenta sólo con programas contra la pobreza, pero mientras sigamos pensando esto, entonces no podemos enfrentar el trabajo infantil.
La cuestión social en nuestro país es que sólo 5.2 millones de niños no tienen carencias de educación ni de alimentación, son los privilegiados, esto nos pone que en los lugares rurales e indígenas viven con mayor dureza la pobreza y esto pone en el centro el enorme tema de la cuestión social.
El gran tema que favorece el trabajo infantil es la desigualdad, que está en el dolor que viven los más pobres, ocho de cada 10 niños en Chiapas viven en pobreza, en Puebla siete de cada 10, es decir la incidencia es mayor en los estados del sur sureste del país.
Los programas gubernamentales que se han insertado en entornos familiares de respeto, de capacidad potencian el problema, es el diseño de los programas, ya no es una casualidad pública y una capacidad mítica que porque el programa específico se logró tal impacto.
Por ejemplo, citó Mario Luis Fuentes, se dice que a mayor grado escolar se pospone el embarazo de las mujeres, pero esto implica desde poner mesas de anticonceptivos desde la comunidad, una cultura de tolerancia y respeto entre las parejas, es decir, influyen varios aspectos, pero hay expresiones míticas que dicen este programa resuelve esto, pero esto no es así.
Por ello se requiere una visión completa de lo que es una política social, poner en el centro la desigualdad e iniquidad y la realidad de un país con leyes que no se cumplen, sostuvo el coordinador de la revista México Social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario