Minerva Hernández
Ciudad de México (MÉXICO).
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Cientos de personas buscando acercarse, políticos celosos de su espacio y las complicaciones propias de estar cerca de un personaje público fueron algunas de las situaciones que el cineasta Lorenzo Hagerman tuvo que enfrentar al realizar el documental '0.56%', el cual se centra en el momento en que Andrés Manuel López Obrador contendió a la presidencia de México.
"Fue un documental fuerte de filmar. Había momentos en que entrabas a lugares donde había millones de personas queriendo darle la mano a Andrés Manuel, y tú en medio. Técnicamente fue difícil".
"Todos los días, cada vez que grabábamos, había que convencer a una serie de filtros para poder entrar. A lo mejor entraba algún asesor o alguien del gabinete que no estaba de acuerdo, y ese día el acceso duraba tres minutos", cuenta Hagerman, responsable de la fotografía de 'Presunto Culpable'.
El filme que se estrena esta semana presenta la historia de López Obrador a partir del 1 de abril de 2005, cuando era Jefe de Gobierno del DF y la sección instructora de la Cámara de Diputados estaba por anunciar si iniciaba un juicio de desafuero en su contra.
A partir de entonces, y gracias a la intervención de Lynn Fainchtein, quien produjo y musicalizó el proyecto, Hagerman estuvo tan cerca como pudo del tabasqueño, quien, tras unas controvertidas elecciones, perdió la Presidencia por tan sólo un '0.56%' de diferencia ante Felipe Calderón.
"La finalidad del documental fue ver cómo suceden las cosas, ver al interior del equipo de un político, cómo suceden esas pláticas, los estados de ánimo. Como ciudadanos, tenemos muy pocas veces acceso a tener ese punto de vista", explica el realizador.
Hagerman ha sido corresponsal de guerra y, por más de 19 años, ha trabajado como fotógrafo para varias televisoras y compañías internacionales, como BBC, Canal+ y Discovery Channel.
Ésta es la primera ocasión que realiza un trabajo tan exhaustivo acerca de un acontecimiento político, y, a pesar del tema, asegura que es un material imparcial.
"Buscamos a Roberto Madrazo y a Felipe Calderón para poder hacer aunque fuera una semana o unos días. Tener un montaje paralelo hubiera sido enriquecedor. Nunca nos pelaron. A duras penas pudimos conseguir esa entrevista (con Calderón, de unos minutos)".
Hagerman afirma que, por lo que sabe, López Obrador no ha visto el filme.
"Desde enero de 2007, cuando termina la filmación, no lo volví a ver. Cuando se hizo el estreno internacional, en Amsterdam, hablamos con su gente para decirles que el día que quisieran les podíamos organizar una proyección. Nunca volvimos a saber nada de ellos".
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